Esta cirugía no es muy invasiva.
Para la mayoría de las personas, el procedimiento toma menos de una hora, dependiendo del procedimiento específico.
Es probable que se vaya a casa el mismo día para recuperarse.
Debe usar una bolsa de hielo en la rodilla y un vendaje. El hielo ayudará a reducir la hinchazón y minimizará el dolor.
En casa, debe tener a alguien que lo asista, al menos durante el primer día.
Trate de mantener la pierna elevada y póngale hielo durante uno o dos días. También necesitará cambiar su vendaje.
Su ortopedista le dirá cuándo hacer estas cosas y por cuánto tiempo. Es probable que necesite ver a su cirujano para una cita de seguimiento unos días después del procedimiento.
Su médico le dará un régimen de ejercicios para seguir en casa para ayudar a recuperar su rodilla, o le recomendará un fisioterapeuta hasta que pueda usar su rodilla normalmente.
Los ejercicios son necesarios para ayudar a restaurar su rango completo de movimiento y para fortalecer sus músculos.
Con el cuidado adecuado, su perspectiva después de este procedimiento es excelente.